martes, 12 de abril de 2011

Romance de la Noche sin su Luna

Qué me importan sus mentiras,
sus arranques de bravura,
si es el mundo un avispero,
una trampa gris y oscura.

Sabe el odio que es mi vida,
una sombra que supura,
una flor que se marchita,
una noche sin su luna.

Hoy contemplo tu mirada,
hoy reparo en tu hermosura,
si contengo en tí mi aliento,
no me invade la negrura.

Vuelo libre del tormento,
del dolor y la amargura.
Son tus ojos mi alimento...
esta noche, sé mi luna.

1 comentario:

CobolFreak dijo...

Que bonito, me alegra que de cuando en cuando vuelvas a publicar algo. Me alegra que sigas escribiendo.